Un bebé que toma leche materna debe poder extraer la leche del pecho sin problemas. Debe recibir suficiente leche para aumentar de peso y conseguir una nutrición adecuada. La succión del bebé también “envía señales” a los pechos para que mantengan o aumenten la cantidad de leche que producen. Si el bebé no extrae bien la leche, puede tener problemas de aumento de peso y nutrición porque no está recibiendo una cantidad suficiente. Una mala extracción disminuirá la producción de leche de la madre.

Condiciones que pueden causar problemas de succión o prensión

Hay muchas cosas que afectan la capacidad del bebé para succionar y extraer leche del pecho. Algunos bebés tienen problemas para mantenerse despiertos. Otros bebés tienen problemas para coordinar los patrones de succión, deglución y respiración. Algunos tienen afecciones que afectan la estructura de la boca y dificultan la alimentación. Las causas de los problemas de succión o prensión incluyen, entre otras:

• Nacimiento prematuro
• Medicamentos durante el trabajo de parto y el parto
• Síndrome de Down
• Ictericia
• Infección
• Defectos cardíacos
• Frenillo corto
• Labio leporino o hendidura del paladar

Señales de problemas

Es importante conocer las señales de que un bebé no extrae bien la leche del pecho. Se pueden tomar medidas para corregir el problema.

Signos de succión ineficaz en el bebé:

• No se despierta por su cuenta para alimentarse ocho o más veces en 24 horas o al menos cada 3 horas.
• Se prende y luego se desprende del pecho con frecuencia durante la toma.
• Se queda dormido a los cinco minutos de prenderse o después de succionar dos o tres minutos.
• No succiona con regularidad durante los primeros 7 a 10 minutos de la toma.
• Se alimenta durante más de 30 minutos sin comportarse como si estuviera lleno.
• Tiene menos de dos deposiciones en 24 horas hacia el final de la primera semana (durante las primeras cuatro a ocho semanas).
• Moja menos de seis pañales en 24 horas hacia el final de la primera semana.
• Tiene una pérdida de peso rápida o excesiva (más del 7 al 10 %) durante los primeros 10 a 14 días, o un aumento de peso lento (menos de ½ a 1 onza por día).

Signos en la madre:

• Tiene los pezones o la areola doloridos o con hematomas persistentes.
• Tiene los pezones enrojecidos, con heridas o grietas.
• Tiene los pezones arrugados o aplanados después de las tomas.
• No tiene los pechos llenos antes de las tomas ni blandos después de alimentar al bebé.
• Tiene los pechos muy congestionados, más de un episodio de conductos estrechos (conductos obstruidos) o infecciones mamarias, como mastitis.

Ayuda con la lactancia materna

Los problemas de lactancia pueden ser muy incómodos, pero la mayoría de los bebés aprenderán a amamantar si se les da tiempo. Es importante trabajar con el médico del bebé y su asesora en lactancia certificada (IBCLC) para detectar problemas de prensión o succión. Hay cosas que usted puede hacer para ayudar en el proceso de lactancia. También debe asegurarse de que su bebé reciba suficiente alimento. Siempre consulte al médico de su bebé si tiene preguntas.

• Despierte al bebé para amamantarlo cada tres horas. Aliméntelo antes si el bebé da señales o pistas de que está hambriento.
• Tenga en cuenta que a su bebé le irá mejor en algunas tomas que en otras.
• Masajee el pecho hacia el pezón durante la toma. Esto ayudará a que la leche fluya hacia la boca del bebé y lo animará a permanecer despierto y continuar succionando.
• Lleve un registro de la cantidad de pañales mojados y deposiciones que tiene por día. Anote la cantidad y el color de las deposiciones.
• Si su bebé no se alimenta bien del pecho, utilice un extractor de leche eléctrico doble de uso hospitalario para desarrollar y mantener un buen suministro de leche. Extráigase leche después de alimentarlo.
• Ofrézcale leche materna extraída para complementar la alimentación según las indicaciones. Hable con el médico de su bebé sobre el uso de leche donada de un banco de leche o fórmula si no tiene suficiente leche para alimentarlo.
• Algunos bebés necesitan ayuda para aprender a succionar. Si tiene inquietudes, pídale consejo o remisiones a su médico.
• Determinados dispositivos y métodos de alimentación pueden ayudar al bebé a que aprenda a mamar. Una asesora en lactancia certificada o un proveedor de atención de la salud pueden ayudarla a decidir si un dispositivo o método es adecuado para su bebé.

Busque apoyo; consulte a su asesora en lactancia certificada o al proveedor de atención de la salud de su bebé si tiene alguna inquietud o pregunta. Su red de apoyo puede ayudar a brindarle la información y el apoyo moral que necesita.

Comuníquese con nosotros

Para obtener más información, llame al Centro de Medicina de Lactancia Materna (Center for Breastfeeding Medicine) al 513‑636-2326.